Tapa | Portada | Portada 1615 |
El original figura con el nº 11 en el Catálogo Egoscozábal de la colección cervantina de la Biblioteca Nacional (QT.20): Madrid, Juan de la Cuesta: Francisco de Robles, 1615, 4º.-
Edición Príncipe de la segunda parte del Quijote.
Ríos y Rico 34. CCPBE XVII III, 3618.
El original también figura con el nº 11 en la Iconografía de las ediciones del Quijote, de Manuel Henrich (QT.24): Madrid.- 1615.- Juan de la Cuesta.- Un tomo en 4º.- Contiene, además del texto, tasa, fe de erratas, aprobaciones, privilegio, prólogo, dedicatoria al Conde de Lemos y tabla.
Primera edición de la Segunda parte.
El original figura con el número 12 en la Bibliografía Crítica de ediciones del Quijote desde 1605 hasta 1917, de Juan Suñé (QT.58): Primera edición de la Segunda parte. En 4º, 8 hojas preliminares, 280 folios, 3 hojas de tabla y una final que dice: EN MADRID, por Juan de la Cuesta.- Año M.DC.XV.
Según D. Leopoldo Rius, "estando ya hecha la tirada de esta edición príncipe, mandó la Inquisición expurgar las palabras que dice la Duquesa en el cap. XXXVI: - y advierta Sancho que las obras de caridad que se hacen tibia y flojamente no tienen mérito, ni valen nada - . Mas, se escaparon del expurgo algunos ejemplares que habían ya salido de la nación; de manera que las ediciones de Bruselas (1616), de Lisboa (1617), de Londres (1738, 1781) y muchas otras impresas en el extranjero, conservan aquellas palabras, siendo así que aparecen sin ellas todas las ediciones hechas en España durante los siglos XVII y XVIII, empezando ya el expurgo en la edición de Valencia (1616), impresa pocos meses después de la príncipe, y apareciendo también expurgada la de Barcelona de 1617". Podrá ser cierto todo cuanto dice el ilustre bibliógrafo, mas también lo es que, el ejemplar que sirvió al Sr. López Fabra para hacer su reproducción por medio de la foto-tipografía en 1873, se leía y se lee en sus facsímiles la citada cláusula.
(NOTA: También se lee en el facsímil de la Real Academia que estamos comentando. A propósito de la Inquisición, ver Q.119, de Antonio Bergnes de las Casas, 1839, en el que se restituye la citada frase.)
Continúa Suñé: Para los que aún pretenden que Cervantes corrigió la segunda edición de 1608, se ponen a continuación los errores tipográficos que aparecen en la príncipe de la segunda parte. (Sigue una relación que ocupa más de cuatro páginas). Tal balumba de erratas dice claramente que Cervantes no corrigió las pruebas de esta edición ni de ninguna de las salidas de las prensas del famoso Juan de la Cuesta.